En el imaginario colectivo todo lo que se vincula con la industria de la televisión suena a glamour, a grandilocuencia, a fastuosidad. Pareciera que se constituye en una esfera de trabajo mágica, en la que todo brilla y en la que sus componentes consiguen un buen nivel de vida.
A pesar de esa sensación, en este ámbito existen un sinfín de variables, que no persiguen un estándar, un solo mecanismo. Así también lo manifestó y dejó al descubierto el propio Ángel de Brito, quien conoce de primera mano las diferentes escalas.
Justo el conductor de LAM se sumergió en esta temática, porque se trata de un hombre que recorrió un enorme camino hasta instalarse como una figura, porque antes se arremangó en proyectos con menor visibilidad y presupuesto, así como transitó por señales de toda índole, ya sea en el cable como en la televisión abierta.
El ciclo de América, que ahora se emite por la noche en contraposición a su histórica franja de la mañana, luce radiante, con vigencia y hasta se configura como lo más visto del canal. En esa dinámica tan particular se destacan las panelistas, que aportan un sustento enorme con sus estridencias y sus discusiones.
Y ni hablar de la estridente Yanina Latorre, que adquirió una corporeidad distinta, para edificar un halo a su alrededor. Todo ese mundillo emana una sensación de bienestar, de opulencia, pero no se remite únicamente a las remuneraciones que se les brinda en los canales.
Hay otros secretos, otras cuestiones que no trascienden y que el propio Ángel deschavó en las últimas horas. Resulta que el animador abrió su interacción en Instagram con sus seguidores, una modalidad que ejecuta habitualmente. En ese ida y vuelta llegó la pregunta de un usuario, que refleja el pensamiento de una enorme mayoría.
“Ángel, ¿se gana relativamente bien en la tele? Un panelista, por ejemplo”, le preguntaron al periodista. Así, de Brito confesó el misterio sobre el sueldo de las panelistas: “Gana bien el que sabe negociar”. Lo que deja abierta a la interpretación.
En tanto que otro followers le consultó sobre Latorre: “¿Yanina está un poco agrandada que ahora dice que no te debe nada?”. El animador fue contundente y exclamó: “Me debe todo, es obvio”.
Hace algunos días, De Brito había contado que los participantes famosos que van a los programas de juegos están por arriba de los 15 mil por día y que pueden llegar a cobrar unos 30 mil pesos.
«Esto también varía según la figura y la frecuencia con la que esté en el aire», aportó. ¿Los panelistas estarán en lo mismo?
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